Los crianceros de Illapel, en la hermosa provincia del Choapa, se preparan una vez más para emprender su viaje hacia la cordillera chilena y argentina. Esta travesía anual es parte de una tradición centenaria conocida como la Trashumancia, en la cual los crianceros llevan a sus cabras en busca de mejores pastos y así garantizar una buena producción de leche para elaborar el famoso queso de cabra, el producto estrella de la región. A pesar de la sequía y las dificultades que han enfrentado, los crianceros de Illapel se mantienen firmes en su compromiso con esta ancestral actividad productiva.
La Trashumancia: Un Legado de Generación en Generación
La Trashumancia es una práctica que ha sido transmitida de generación en generación, pasando de padres a hijos. Aunque el paso del tiempo ha traído consigo cambios y desafíos, los crianceros de Illapel se mantienen fieles a esta tradición, preservando no solo su patrimonio cultural, sino también su forma de vida. Cada año, antes del mes de diciembre, los crianceros se preparan meticulosamente para emprender su viaje hacia la cordillera, llevando consigo a sus cabras y todo lo necesario para enfrentar las adversidades del terreno.
Un Homenaje a los Crianceros y sus Familias
Para conmemorar esta histórica tradición, la municipalidad de Illapel organiza cada año el Día de la Trashumancia y del Criancero Caprino. En su decimotercera versión, este evento se llevará a cabo durante tres días, a partir del 23 de noviembre. Las actividades incluirán una «choca» entre las familias crianceras, el paso de los arreos por la zona urbana y un acto conmemorativo en el Parque Ambrosio O’Higgins.
La «choca» es un encuentro tradicional donde las familias crianceras se reúnen en el Fundo La Aguada para compartir un almuerzo campestre antes de partir hacia la cordillera. Durante este encuentro, se disfruta de churrascas, queso de cabra, mate, té remojado y otras preparaciones típicas. Además, se llevan a cabo juegos populares para grandes y chicos, amenizados por músicos locales.
El Paso por las Calles de Illapel: Un Espectáculo Único
El viernes 24 de noviembre, los crianceros de Illapel, acompañados de sus piños de cabras, partirán desde el Fundo La Aguada para recorrer las calles de la parte alta y el centro de la ciudad. Este desfile de cabras es uno de los momentos más esperados por la comunidad, quienes salen a su paso para desearles éxito en su travesía hacia las veranadas cordilleranas. A pesar de la merma en el número de ejemplares caprinos debido a la escasez hídrica, se estima que cerca de 2.000 cabritas transitarán por las calles de Illapel, capturando la atención de todo el país e incluso de extranjeros que viajan especialmente para presenciar esta manifestación de la identidad choapina.
Un Acto Conmemorativo y el Reconocimiento a los Crianceros
El último día de las festividades, el 25 de noviembre, se llevará a cabo un acto conmemorativo en el Parque Ambrosio O’Higgins. En este evento, se distinguirá a los arrieros y se les entregará un aporte que facilite su incursión en la cordillera y la alimentación de sus animales. Asimismo, se habilitarán stands de emprendedores y productos vinculados al ganado caprino, como leche, carne, queso y comidas típicas. Los visitantes podrán disfrutar de una muestra gastronómica con creaciones culinarias inspiradas en la fiesta de la trashumancia.
Un Llamado a Apoyar a los Pequeños Agricultores y Campesinos
El alcalde de Illapel, Denis Cortés Aguilera, destaca la importancia de esta actividad ancestral y hace un llamado a todo Chile para que se implementen políticas de Estado que apoyen a los pequeños agricultores y campesinos. A pesar de las dificultades que han enfrentado, los crianceros de Illapel demuestran su orgullo por esta noble actividad productiva y su compromiso con la preservación de sus tradiciones. La Trashumancia y el Día del Criancero Caprino son un recordatorio de la importancia de valorar y apoyar a quienes trabajan la tierra, manteniendo vivas nuestras raíces y contribuyendo al desarrollo económico y cultural de nuestras comunidades.