La Sociedad Agrícola del Norte ha seguido de cerca esta situación y también la variabilidad climática.
La Región de Coquimbo enfrenta una gran catástrofe provocada por la escasez hídrica, situación que se agrava en los últimos años y que ha afectado dramáticamente a pequeños, medianos y grandes agricultores, asimismo, a las miles de familias ligadas al mundo rural, cuyas necesidades productivas y vitales están siendo severamente amenazadas.
La Sociedad Agrícola del Norte ha seguido de cerca esta situación y también la variabilidad climática que “ha puesto en evidencia los fenómenos extremos en cuanto a la variación de temperaturas, persistentes sequías, aluviones y una serie de otras condiciones, en las cuales se deben trabajar medidas urgentes para aprovechar el mínimo de agua con la que hoy se cuenta”, señaló la presidenta del gremio María Inés Figari.
CARTA PARA TODAS LAS AUTORIDADES
Durante esta semana el gremio agrícola envió una carta a todas las autoridades regionales, entre Parlamentarios, Delegado Presidencial, Gobernadora Regional, organismos relacionados con el agro y quienes toman decisiones sobre recursos para la agricultura, con peticiones y propuestas de acciones rápidas que ayuden a los productores que viven una verdadera “tragedia” económica.
“En la misiva indicamos que los actuales niveles de dotación hídrica ponen en peligro los cultivos, dado que no se cumple con la demanda mínima básica de agua para su desarrollo”, puntualizó Figari.
RESTRICCIONES EN CUENCAS DE LA REGIÓN DE COQUIMBO
La situación anterior ha registrado restricciones en las distintas cuencas de la región de Coquimbo como es el caso de la cuenca de Illapel, que hoy está entregando sólo el 3% de sus acciones de agua y con un turno cortado, permitiendo entregar sólo un 6% de la dotación hídrica. Para el caso de la cuenca del Choapa, también ajustaron su distribución a sólo un 6% del recurso hídrico para sus canales asociados. En el Valle del Limarí, según los registros del Río Grande sobre embalse Paloma se está entregando un 12.5% del caudal y bajo éste, sólo una dotación de un 10%. Para el valle de Elqui, según los antecedentes, la dotación actual es de un 25% de su caudal, sin embargo, para la próxima temporada se están analizando los volúmenes de agua proyectados, para definir a fines de agosto el valor a entregar.
De acuerdo a lo expuesto anteriormente, la Sociedad Agrícola del Norte ha realizado diversas reuniones en diversos puntos de la región, con el objetivo de saber la realidad y conocer las propuestas inmediatas para buscar soluciones a la problemática por la falta del vital recurso.
MEDIDAS URGENTES
Entre las medidas urgentes que solicita el gremio agrícola está la habilitación de pozos sequía registrados en la DGA para recarga de canales, la habilitación de nuevos pozos según requerimientos de cada organización de usuarios de agua.
También se solicitó geomembranas para revestir canales Geomembranas para revestimientos de estanques intraprediales en apoyo a los agricultores, junto con la adquisición de estanques móviles colectivos para la pequeña y mediana agricultura.
Otro tema que se solicitó fue la condonación de las contribuciones agrícolas impagas y apoyo en reprogramación de deudas sin cortes en servicios básicos como agua y energía, además apoyo para la reprogramación de las deudas contraídas con la Banca y un Fogape dirigido hacia la agricultura.
MEDIDAS DE LARGO PLAZO
En la carta enviada por el gremio agrícola se solicitó política pública que trascienda los gobiernos y fortalezca las medidas de apoyos en el tiempo y fortalezca a la agricultura que entrega la seguridad alimentaria, plantas desalinizadoras financiadas por el Estado para asegurar principalmente para el consumo humano y para la agricultura, reutilización de aguas servidas con nuevas plantas de recuperación en provincias más afectadas por escasez hídrica, modificando la ley relacionada con esta materia, modernización de la ley de riego, buscando mejorar las hectáreas cultivadas vigentes.
María Inés Figari agregó que “es el momento de ir en ayuda directa a nuestra región, con herramientas concretas para salir adelante de este dramático escenario que viven miles de familias del mundo rural, por ello, como gremio, es nuestro deber alertar a todos los organismos del Estado para concretar dichas acciones. La agricultura no puede seguir esperando”.