En el baúl bicentenario que será abierto por la comunidad vicuñense en 100 años más, se colocó historia del santuario de la Purísima del Valle de Elqui y planos del parque que se proyecta construir como legado para nuevas generaciones.
En el patio de la iglesia Inmaculada Concepción de El Tambo, situada en el Santuario de la Purísima del Valle del Elqui, se llevó a cabo la misa de cierre de las celebraciones del Mes del Bicentenario. Espacio en el que se reconoció el aporte de tres personas por su contribución a este proyecto que enaltece la fe católica.
Los reconocidos fueron el alcalde de la comuna de Vicuña Rafael Vera; el párroco de Vicuña José Luis Flores y Carolina Jara, habitante de El Tambo, colaboradora del santuario.
El ejecutivo del santuario de la Purísima del Valle del Elqui Sebastián Tapia, explica que este lugar representa la unión de la fe católica del valle de Elqui en su conjunto, “es un lugar que nos une no tan solo como vicuñenses, sino también como vicaria del Elqui, es decir, Paihuano, Diaguitas Vicuña y Algarrobito. Contento además de poder reconocer a estas tres personas en esta eucaristía, personas que se ponen la camiseta por este santuario”.
Sebastián Tapia agrega que una copia de los planos del parque del santuario de la Purísima del valle de Elqui fueron introducidos en el baúl bicentenario, objeto que será abierto por la comunidad vicuñense en 100 años cuando Vicuña cumpla 300 años el 22 de febrero de 2121. “Colocamos historia de este santuario, inclusive los planos arquitectónicos, hace algunas semanas atrás llegaron a mis manos, los planos del parque, un parque que consideramos empezar en un corto plazo, va a tener una cruz, y la idea es recibir al peregrino de la mejor forma, y que pueda encontrarse a través de la naturaleza con Dios”.
El párroco de Vicuña José Luis Flores ofició esta eucaristía, agradeciendo el espacio y la oportunidad de conmemorar los 200 años de Vicuña, “en este lugar que es tan significativo, tan importante para cualquier persona que ha nacido aquí en este valle. Porque aquí surgió algo tan extraordinario y fue Dios mismo quien nos comunicó, nos llenó de su gracia que este modelo se ha ido replicando en todo el valle, entonces ha sido importante cerrarlo acá y agradecer a las personas que han hecho posible este acto”.
El alcalde de Vicuña Rafael Vera valoró la realización de esta simbólica actividad y el mensaje enviado por el sacerdote. “Con un aforo inferior a las 20 personas hemos realizado esta misa, a las afueras, en el patio del santuario, y con el mensaje del padre, un mensaje positivo, un mensaje de humanidad, un mensaje de solidaridad tan propio de él y nos deja felices. Sentimos que estamos cerrando este bicentenario de la mejor forma”.
Cierre de celebraciones que estuvieron marcadas por diversos hitos como la creación del baúl bicentenario, el tradicional acto central, el lanzamiento del libro de los 200 años, entre otras actividades.