Por: Jorge Leonardo Villalobos Miranda, elquino viviendo en Suecia
Me impacta de corazón lo acaecido en nuestra ciudad de Vicuña, un joven elquino (Franco Jacobo Rojas Collao) miembro de una sacrificada familia ha sido víctima de la violencia de la calle, sea cual sea el motivo, es un ser que deja a una familia en la más pura desesperanza ante la pérdida del un ser amado.
Yo como antiguo habitante de Vicuña y que tuve la alegría de vivir la época de oro cuando se podía caminar por las calles en forma libre, bajo el cielo estrellado de nuestra comuna. Me siento triste al saber que la violencia se apodera de la ciudad, somos muchos más los que queremos vivir en paz, en un ambiente en donde se pueda caminar sin miedos, en donde se puedan encontrar sus habitantes para darse el saludo de la tarde, mañana o madrugada. Lamentablemente los tiempos cambian para bien y para mal, no esperemos que la ciudad se convierta en una ciudad de nadie, es hora que la ciudadanía levante la voz y exija dormir en paz, tenemos el derecho de hacerlo.
Me dirijo a las autoridades con la condición de hijo del valle, aunque viviendo a cientos de miles de kilómetros: «Quiero una ciudad de Vicuña libre de Violencia» por mi madre y todas las madres del valle, por los hermanos y hermanas del valle, por la ciudadanía, por mi.
Saludos fraternales de un elquino que no olvida su tierra y que quiere lo mejor para ella.