Luego de atravesar por el octavo año de sequía consecutivamente, esta temporada de riego parte con un 50% menos de agua embalsada que la anterior, por lo que se pasará de una dotación de 11.300m3 por acción durante la temporada anterior a 8.294m3 la temporada que inicia.
Con un importante marco de participación se desarrolló en Vicuña una nueva Asamblea Ordinaria de Regantes de la Junta de Vigilancia del Río Elqui (JVRE), en la que como cada año se definió la dotación de agua por acción. En esta oportunidad se hizo una oferta única de 8.294 m3 por acción, aprobada de forma unánime.
Esta oferta se definió tomando en cuenta diversas variables, por ejemplo, el agua disponible en embalses, en que mientras al inicio de la temporada 2012-2013 el Puclaro contaba con 31.307.004m3 embalsados, actualmente cuenta con 18.625.382m3, factor relevante, considerando que la tendencia es que el aporte del río disminuya de un 88% al 40% del total distribuido.
Según explicó el Repartidor General de Aguas de la JVRE, Dagoberto Bettancourt, la gestión de esta nueva temporada implica controles mensuales, debido a que “hay muchas incertezas en la planificación del riego, no contamos con todo el instrumental e información que deberíamos considerando la importancia del tema, estamos trabajando para eso, pero mientras tanto fuimos capaces de hacer algo serio con lo que teníamos y eso fue plantear un desmarque del 30% durante los primeros 8 meses”.
Gustavo Pinto es Presidente del Canal Ponce y Manantial, del sector Quebrada Pinto en Paihuano, canal de 3,5 kilómetros de extensión, en que se cultivan principalmente frutales como vides, duraznos y paltos.
Sobre la nueva dotación, Pinto considera que “no es suficiente, pero no se podría pedir más, porque hay que ser conscientes de que no nos alcanza para más. Está claro que no vamos a poder regar al 100%, pero todo depende del regante y tratar de estirar para que nos alcance.
Por su parte, uno de los Directores de la JVRE y Presidente del Canal Barranca, Cristian Pinto, puntualizó que la situación actual es muy complicada para los canales de la primera sección, sobre todo para los más grandes, en que “no va a ser suficiente un 30% de desmarque en la temporada alta, que son los meses de diciembre y enero, pero ellos se están arreglando, colocando geomembranas y viendo cómo sacar adelante la temporada para poder producir”.
Similar es la situación del Canal Saturno, cuya Presidenta Marcia Rivera Araya destacó la forma en que se ha manejado el escenario, pues “los pocos recursos que tenemos han sido bien manejados por el directorio y las personas a cargo y trataremos de amoldarnos a esa cantidad de agua que es suficiente para sobrevivir en este minuto tan grave de sequia que estamos pasando”.
La distribución de los 8.294 se realizará con un desmarque del 30% los primeros 8 meses, quedando los últimos 4 meses con un 20% de desmarque, lo que será evaluado en el desarrollo de la temporada, considerando la dificultad que implica este regante para los colistas de cada canal.
Los colistas son los últimos regantes de un canal y, como explicó Cristian Pinto, “en los canales que hoy no están revestidos y no tienen ningún adelanto las filtraciones son mayores, la pérdida de nuestro canal llega casi al 30%, así que un canal que está a un 30% llega con un 15% al final”.
La comunidad de aguas Canal Saturno es colista y su Presidenta Marcia Rivera detalló que las siembras se están reduciendo a la mitad, con lo que “hay que tratar de producir algo que no requiera de tanta agua, como cambiar las lechugas por morrones, los frutales en este minuto no tenemos tanto, pero por ejemplo los que tienen papayas las están cambiando por mandarinas”.
Sobre esta distribución de desmarque, Bettancourt reiteró que esta situación se evaluará en abril, pues “el 20% corresponde a los últimos 4 meses para cumplir matemáticamente con lo evaluado, en ese momento hay que tomar decisiones, si entregamos ese 20% sin pareo, porque el pareo es el peor escenario, esa es la crisis absoluta, entendiendo que ya con el 30% hay colistas que no reciben agua, por lo que el impacto existe y es real”.
Finalmente, el Repartidor General de aguas de la organización destacó la unanimidad de la decisión, pues “esta escasez implica impactos, es imposible que con tantos años de sequía pretendamos tener un riego distinto al que tenemos, y eso pasa por entender que en sus planificaciones productivas tienen que hacerse cargo de esto”.