En el último año, se han recuperado nueve inmuebles debido al mal uso de los subsidios estatales destinados a soluciones habitacionales. A través de más de 3 mil fiscalizaciones, la seremi de Vivienda y Urbanismo ha tomado medidas para evitar que las viviendas sociales sean utilizadas de manera incorrecta. Estas viviendas, ya sea que estén siendo arrendadas o se encuentren deshabitadas, pasan a estar bajo el control del Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu).
El titular regional de la cartera de Vivienda y Urbanismo, José Manuel Peralta, ha dejado claro que aquellos que hagan un mal uso de las viviendas sociales perderán este beneficio y la propiedad será devuelta al Estado. Sin embargo, el proceso no es inmediato, ya que se realizan al menos tres supervisiones en terreno para asegurar que se esté llevando a cabo un uso adecuado.
Bajo esta premisa, el gobierno ha intensificado las fiscalizaciones desde que asumió el cargo. En caso de comprobarse el mal uso de una vivienda social, esta será otorgada a una persona que realmente la necesite y que ya tenga asignado un subsidio en ejecución. Es importante destacar que estas medidas forman parte de una política pública a nivel central, ya que el Subsidio Único Familiar (SUF) es un privilegio estatal que no puede permitirse ser mal utilizado.
Para denunciar el uso irregular de las soluciones habitacionales adquiridas mediante ayuda estatal o que son propiedad del Serviu, se puede acceder a la página web del Ministerio de Vivienda y Urbanismo. Esta denuncia puede realizarse de manera anónima y no se requiere ningún documento específico. Sin embargo, es fundamental contar con la ubicación precisa de la vivienda utilizada de forma incorrecta, y se pueden adjuntar fotografías, videos u otros documentos que respalden la denuncia.
¿Qué es el Subsidio Único Familiar (SUF)?
El Subsidio Único Familiar, también conocido como SUF, está destinado a personas de escasos recursos que pertenecen al 60% de la población nacional más vulnerable según el Registro Social de Hogares (RSH). El monto de este beneficio es de $20.328 por carga familiar, y en el caso de personas con discapacidad, este monto se duplica a $40.656. Además del subsidio, aquellos que son causantes tienen derecho a acceder a prestaciones médicas y odontológicas gratuitas, tanto preventivas como curativas.
Las embarazadas también pueden solicitar el Subsidio Maternal a partir del quinto mes de gestación. En este caso, al recibir el Subsidio Maternal, dejan de recibir el Subsidio Único Familiar y este último pasa a ser otorgado a la madre. El Subsidio Maternal cubre todo el embarazo y se paga a través del Instituto de Previsión Social (IPS).
Es importante destacar que el Subsidio Único Familiar es un beneficio único, otorgado una vez en la vida a un núcleo familiar. La sociedad chilena no puede permitirse entregar subsidios que sean mal utilizados. Por lo tanto, siempre se recomienda a la población que, si tiene una necesidad habitacional, postule a un subsidio para asegurarse de recibirlo de manera legal y correcta.
