Dada la magnitud del incendio se activaron todas las alarmas y se desplegó un operativo con bomberos de Paihuano, Vicuña, La Serena y Coquimbo.
Más de 15 hectáreas con plantaciones de uva de exportación y árboles frutales, lo que incluye pérdidas por millones de pesos, fue el saldo que dejó el incendio que afectó durante la tarde de ayer al sector de Chañar Blanco en la com
una de Paihuano.
El hecho comenzó a registrarse alrededor de las 12:00 horas con cañaverales que se encontraban a un costado del río, lo cual, debido al viento, afectó a nueve pequeños agricultores y dos fundos: Chañar Blanco y Copequén.
El encargado de emergencias de la municipalidad de Paihuano, Raúl Esquivel, informó que fue al mediodía cuando vecinos del lugar alertaron sobre “unas llamas” que sutilmente se dejaban ver en la ribera del Río Claro. Por lo mismo, el funcionario acudió junto a personal de la Tercera Compañía de Bomberos de la comuna, pero “ya era demasiado tarde, las condiciones climáticas, básicamente el calor y el viento, habían expandido el siniestro y cuando acudimos ya era de proporciones”, indicó Esquivel.
Dada la magnitud del incendio se activaron todas las alarmas y se desplegó un operativo pocas veces visto. Fueron más de cien voluntarios provenientes de Pisco Elqui, La Serena, Coquimbo, Vicuña y de Paihuano los que acudieron a combatir el fuego. 
Los habitantes del sector estaban conmocionados con el desastre. “Como a las doce nosotros nos dimos cuenta, pero vimos el humo a lo lejos y no hicimos caso. Después volvimos a ver como a los 20 minutos y las llamas estaban encima, ahí entramos en pánico”, cuenta Yaqueline Aguilera.
Además de pérdidas materiales, los lugareños lamentaron el invaluable daño al paisaje. “El entorno ya no volverá a ser lo de antes, todo esto ayer era puro verde y mira ahora, puras cenizas”, indica Enrique Martí, de las Cabañas Chañar Blanco.
Ismael Maldonado, comisario de la Quinta Comisaría, indicó que las causas del incendio “serán motivo de investigación posterior”. Sin embargo, según pudo consignarse a través de testigos, el fuego habría tenido su génesis en una fogata mal apagada en la ribera del río.
Fotografías: Esteban Pérez Trujillo
